El gobierno de Joe Biden anunció que el 22 de noviembre es el plazo máximo para que los empleados federales de Estados Unidos estén completamente vacunados.
El presidente Biden firmó una orden ejecutiva que obliga a los empleados que trabajan en la rama ejecutiva a estar vacunados como medida de prevención en un país en donde cada día están aumentando los contagios de Covid-19.
Hace unos meses Biden había asegurado que los empleados debían estar vacunados o someterse a pruebas frecuentes para demostrar que no estaban contagiados, además de estar obligados a usar tapabocas en los lugares de trabajo y tendrían restricciones en viajes oficiales.
Las nuevas medidas también obligan a vacunarse a millones de contratistas que hacen negocios con las empresas federales.
Además, las empresas que tengan más de 100 empleados deberán vacunar a sus trabajadores o someterlos a exámenes semanales para verificar si están contagiados.
El Gobierno exigirá la vacunación de millones de trabajadores de hospitales y otras instituciones que reciben fondos de programas como Medicare y el Medicaid que a tienen a las personas más pobres.
El incremento en el número de hospitalizaciones y de muertes a causa de una nueva ola del Covid-19 causado por la variante Delta, llevó a la administración de Biden a tomar medidas más drásticas que obliguen a la población a vacunarse en un país en donde millones de personas se niegan a hacerlo.