La Superintendencia Nacional de Salud ordenóhoy la liquidación de la EPS Coomeva, trasevidenciar la imposibilidad de corregir la crítica situación financiera en que se encuentra y comoprotección a la vida y la salud de sus 1.2 millonesde afiliados en 24 departamentos del país.
La EPS estaba bajo las medidas de toma deposesión y de intervención forzosa paraadministrar desde hace varios meses, pero, apesar de los esfuerzos del agente especialdesignado por la Supersalud, ya había undeterioro continuado de sus principalesindicadores operacionales, asistenciales yfinancieros.
La EPS estuvo en medida de vigilancia especial por cuatro años y medio, tiempo durante el cual la Supersalud le impartió instrucciones y órdenes que no atendió, particularmente para que diera respuesta a la acumulación de quejas, reclamos ypeticiones de sus afiliados, y a la necesidad decumplir con estrictos planes de capitalización.
“Como lo venimos haciendo a lo largo de nuestragestión, no vamos a permitir que las EPS jueguencon la salud de los usuarios y que pongan enriesgo la atención que requieren la población infantily los pacientes con cáncer o insuficiencia renal”,expresó el Superintendente Nacional de Salud, Fabio Aristizábal Ángel.
Como consecuencia de la orden de liquidación sedesigna a Felipe Negret Mosquera como agenteespecial liquidador, quien deberá entregar a laSuperintendencia la base de datos de sus afiliadosy el Ministerio de Salud procederá a surtir elprocedimiento de traslado de esta población aEPS receptoras que no cuenten con ningunamedida administrativa y que posibilitará lagarantía de acceso, calidad y oportunidad en laprestación de los servicios.
Una deteriorada situación financiera
La Supersalud evidenció que la EPS no cumplecon las condiciones financieras y de solvencia,con los indicadores de capital mínimo y depatrimonio adecuado, además de que se encuentraen riesgo de iliquidez, arrastra un crecienteendeudamiento y su crisis financiera ocasiona quesu red de prestación cerrará las puertas y dejaráde atender a sus afiliados.
De acuerdo con la información de laSuperintendencia, la EPS tiene pasivos cercanos a los 1,7 billones de pesos, un nivel deendeudamiento de 1,6 veces sobre el valor delactivo, una brecha de 204.230 millones de pesosen el patrimonio adecuado y unas pérdidasacumuladas superiores al billón de pesos.
Precisamente, sólo durante los primeros 11 mesesde 2021 la EPS registró pérdidas por 190.219millones de pesos y durante esta vigencia el 40%de su pasivo se concentraba en 30 acreedorespor valor de 700.352 millones de pesos, lo cualgeneraba un alto riesgo de liquidez por laprobabilidad de incumplimiento en esasobligaciones.
Quejas y tutelas por incumplimientos enatención
De acuerdo con la resolución 189-6 de este 25de enero, se identificó que la EPS Coomeva nogarantiza a sus afiliados el acceso a losservicios de salud y ponía en riesgo la atención ala población gestante, a los menores de edad ya los pacientes con enfermedades de alto costo (cáncer, insuficiencia renal, VIH y hemofilia).
En la radiografía hecha por la Supersalud apartir de las acciones de inspección y vigilanciarealizadas durante los periodos 2019, 2020 y2021, se concluyó que la EPS Coomeva no realizaba el diagnóstico oportuno de pacientes crónicas con cáncer de cuello uterino y cáncer demama debido a las bajas coberturas en la tomade citología cervicouterina, colposcopia ymamografía.